Tenemos una historia y Amada es su protagonista. Una chica valenciana, una soñadora que encontró su inspiración en las olas azules y cristalinas del mar de Menorca.

Allí, en la tranquilidad de la costa menorquina, entre el susurro del mar y el aroma refrescante del limón, nació una idea. Decidió romper con lo convencional y diseñar calcetines que nos recordaran que la vida es demasiado corta para no ser felices.

Así surgió esta marca, hecha aquí, por los de aquí, con el firme propósito de llevar un pedacito de Mediterráneo en cada paso que damos.

No hay nada que nos apasione más que pensar que pensar que cada paso vuestro será una celebración de la vida, de la creatividad y de la belleza que nos rodea.